jueves, 26 de febrero de 2015

Los otros jóvenes de Peñarroya-Pueblonuevo


Si tuviesemos que comentar algunos de los tópicos con los que definimos, los de aquí y los de más allá, a la juventud de Peñarroya-Pueblonuevo detacaríamos  la falta de preparación y/o de educación. Los que presumen de juiciosos relacionan este fenómeno con la  ociosidad pagada por sus padres prejubilados, con la asunción de una mal entendida  cultura del trabajo debida al establecimiento en el municipio de un modelo productivo  unidireccional o, simplemente, con las características  del pueblo como polo de atracción de gente de baja calidad. Recordemos que históricamente, el oficio de minero, aunque mejor pagado que el de jornalero, hasta hace pocas décadas fue considerado el más duro  de todos los trabajos. No en vano, entre las penas a las que se imponían a los reos de éste y otros reinos del continente se encontraba la condena a trabajos  forzados en canteras y minas. En Almadén tenemos el caso más próximo. Esta leyenda del miedo a todo  lo minero y las "pelis" del Oeste sobre la fiebre del oro hicieron el resto para construir una identidad de "ciudad sin ley"  en Peñarroya-Pueblonuevo en el imaginario colectivo.

La cosa llega hasta el punto de que muchos  ciudadanos, aún hoy, entienden, incluso,  esta anomalía en el comportamiento de la juventud de este pueblo como  endémica, es decir, como un  fenómeno  singular y exclusivo del lugar.
Nada más lejos de la realidad. Los tópicos no son leyes, aunque muchos, en ese afán soberbio de llevar la razón, ya quisieran que lo fueran. Tan sólo son actitudes basadas en prejuicios y opiniones desprovistas de cualquier  fundamento científico o racional. La últimas experiencias educativas que están llevando a cabo profesores como Antonio Martín  en el IES Florencio Pintado, el peor de los Institutos  (ahí va otro tópico absurdo) de este pueblo, deben hacernos reflexionar sobre si todo lo que se habla de malo, sobre todo lo que se dice de negativo de la juventud de esta población es cierto. 


Fuente: infoguadiato
Durante los meses de Enero y Febrero alumnos y alumnas de Peñarroya-Pueblonuevo, si, de Peñarroya-Pueblonuevo, han puesto en marcha proyectos artísticos pioneros en Andalucía  relacionados con la creatividad literaria, entre los que destacamos el pintado de micropoesías en pasos de cebra del centro urbano de esta localidad.   

La semana pasada  se han atrevido con un  proyecto  de acción poética con Haikus del que no se ha salvado, afortunadamente, nuestra Vía Verde. Esta actividad consiste en la elaboración y exposición de versos en una pizarra en diferentes puntos del antiguo trazado ferroviario con el objetivo, por un lado, de acercar la poesía a la ciudadanía y, por otro lado, de denunciar situaciones del entorno que nos rodea. A continuación, os dejo alguna de sus creaciones:














 

He aquí un vivo ejemplo de que  los jóvenes de esta localidad pueden llegar hacer cosas tan  geniales, únicas y  ejemplares  como se hacen en otros lugares del Guadiato, de la provincia o de la región.  Tan sólo necesitan estar  dirigidos y motivados por buenos pedagogos. En este punto quisiera decir que estos trabajos que se exponen son el espejo en el que se están mirando otros Centros Educativos de nuestra región para desarrollar sus propios programas  en asignaturas tan diferentes como Lengua y Literatura, Ciudadanía o Proyecto Integrado. Al mismo tiempo, también es un modelo de colaboración comarcal, ya que en este proyecto participan alumnos de Espiel y Belmez.

En estos momentos en que se ponen en duda las virtudes de nuestro sistema educativo y en que se infravalora a nuestros jóvenes, en especial a los de este municipio, el presente trabajo pone el acento en la importancia del profesorado como motores del cambio de una sociedad y también en la capacidad de nuestra juventud, también la de Peñarroya-Pueblonuevo,  para transformar su propia realidad, o bien, construir una nueva donde no la hay o donde ya no queda.


Alumnas del IES José alcántara fabricando cajas-nido para la Vía Verde
de La Maquinilla



La juventud de Peñarroya-Pueblonuevo, como la de cualquier parte del mundo, queda representada en el famoso gato del dirigente chino Deng Xiaoping: blanca o negra, lo importante es que cace ratones. Los jóvenes de Peñarroya-Pueblonuevo, preparados adecuadamente, valen para cazar ratones, para escribir poesía o para aquello en lo que se les eduque. Tan sólo necesitan medios educativos formales y no formales libres, democráticos y de calidad  a su alcance.

Desde aquí, agradecemos las muestras de apoyo de estos jóvenes al proyecto de Vía Verde del Guadiato y a su profesor, Antonio Martín, por tener la osadía de creer en ellos. Son jóvenes de Peñarroya-Pueblonuevo.  Y no son ni malos ni  estúpidos.

Para más información sobre las actividades que realizan estos jóvenes de Peñarroya-Pueblonuevo, consultar este enlace:

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